lunes, octubre 19, 2009

High School Nocilla

En Nocilla Experience, Agustín Fernández Mallo imaginaba una suerte de making of improbable de la Rayuela de Julio Cortázar. Que Enrique Vila-Matas, autor que convirtió su medio en una (falsa) superfície llena de ironía y sofisticación bajo el título de Historia abreviada de la literatura portátil, planee sobre las páginas de este cierre no es una casualidad: es una declaración de intenciones por parte de quien hace el más aparatoso tour de force jamás visto, haciendo propia la pirueta de uno de los personajes que poblaban la segunda entrega.

Sin embargo, lo más interesante de Nocilla Lab está en el documental que la cierra, en el que se combina una estética a medio camino entre el programa musical underground y el programa literario, en el que se explican los fundamentos teóricos de la saga, explicados por Eloy Fernández Porta y Vicente Luis Mora (entre otros, claro). Este documental me parece un gesto, sí, vanguardista ligado íntimamente a la visionaria High School Musical 3.

Si en High School Musical 3 se nos descubría que las obras pueden oficializar al fan dándole un protagonismo en los créditos finales, en Nocilla Lab tenemos a un artista que selecciona teorías de sus receptores (los críticos) y las oficializa. Es decir, que Nocilla Lab y Fernández Mallo han ido un paso por delante de la posible crítica, y de una pirueta menor ejecutada en su primera entrega, que recordaba vagamente a Bolaño: se han convertido en los dueños de la interpretación de la obra, ha marcado las posibles rutas por las que el crítico debe transitar y han convertido al lector en un mero publicista, en alguien que ya tiene su camino.

Este gesto tan desconcertante y sinuoso convierte a Fernández Mallo en un artista que se cree dueño no ya de su obra, sino también de sus significados y disloca toda crítica posible. Como en High School Musical 3, los límites de la obra no están en su final, sino donde el artista los decide.

16 comentarios:

observer dijo...

Vaya, he de ver HSM3! Lo del artista que quiere controlar la lectura de su obra es intrusismo por su parte. Creo que la tarea del crítico es, precisamente, detectar en una obra lo que ésta afirma sin saber que lo está afirmando.

Anónimo dijo...

Es a lo que, inevitablemente, tienden todas las artes últimamente.

Pepemomia dijo...

Me gusta que el post no parezca tomar partido (aunque la comparación con HSM es suficientemente cruel). Me declaro fan nocillero y en mi estantería ya espera el Lab. No he visto la peli, lo haré enseguida, pero entendí que, más que cerrar las puertas a la interpretación, AFM pretendía hacer un making-off también teñido de ciertas dosis de ficción (ya se sabe que en ficción, hasta las dedicatorias...) al hilo de las "performances" estas que tanto le gustan al autor, como esa con las que nos deleitó en su blog en la que un artista escanea su propio césped (!). Yo confieso que tampoco acabo de verlo, pero... al tiempo (y al análisis crítico, desde luego).
A diferencia de lo que creo entender en tu post, creo que AFM abre (sí, algunos los reabre, por supuesto) más caminos de los que cierra.

El Miope Muñoz dijo...

Bueno, yo hablo desde la honestidad ¿eh? Creo que HSM 3 es vanguardia. ¡Qué tiene de cruel, señor Momia! Por otra parte, gracias a usted y a todos por los comentarios.

Rosualdo dijo...

Otro modernete que se pincha con la nocilla/marketing... Uf, que ganas!

Pepemomia dijo...

Bueno, si hay que encasillar al personal, ¡pues adelante! Fino análisis, fino. Supongo, por tanto, que cuando Candaya publicó el primer Nocilla fue todo marketing, por supuesto, como antes la editorial DVD y "Carne de píxel". Si es que está todo podrido... Cuidado con Sergio Chefjec, también de Candaya, que igual le dan el Planeta...

El Miope Muñoz dijo...

Don't feed the troll, mr. Momia que usted tiene cosas más divertidas que decir.

Pepemomia dijo...

OK, me dejé provocar... sorry!

Ibrahim B. dijo...

Aunque no entiendo muy bien a qué te refieres con "Este gesto tan desconcertante y sinuoso convierte a Fernández Mallo en un artista que se cree dueño no ya de su obra", pues a fin de cuentas es evidente que todo artista 'es' dueño de su obra (no hay que creerse nada; ergo entiendo que es una mera forma retórica), ni tampoco -lo admito- sé dónde está el vínculo con Bolaño, me parece interesante la lectura que haces del video. En un par de días dialogo contigo en mi blog.
Abrazo,

El Miope Muñoz dijo...

Gracias, Ibrahím. Lo de Bolaño está por el final de Nocilla Dream con el de los detectives salvajes. Y no, no comparto para nada los postulados del artista y la obra.

Yo soy alumno, más o menos prudente y más o menos inepto, de Northrop Frye que en su Anatomía de la Interpretación nos enseñó que la mitad de la obra está en la Recepción.

Ibrahim B. dijo...

O sea, si ahora sí desencripto bien, tu postura es de recordatorio de Gadamer y de defensa de la Escuela de Constanza (o de Northrop Frye, a quien no conozco, pero que según lo que dices es la misma tesis que la de Jauss), para criticar o plantear que Agustín reduce las posibilidades interpretativas de su trilogía mediante el video. Es decir, siguiendo la dicotomía hermenéutica de Hirsch (perdón perdón perdón) Agustín fulminaría la significación (recepción) para poner en su lugar solo el sentido (autor; o en este caso, autores, si quieres). No sé, no sé: en verdad no creo que el video diste mucho de cualquier otro autor que se interprete a sí mismo, o más en particular de cualquier autor posmoderno metaficcional (Coover, Barth, ya sabes). Otra cosa es que el resto de la crítica se lo crea.
Perdón si estoy limitando el debate. Matiza lo pertinente, pues.

El Miope Muñoz dijo...

Al contrario, Ibrahim, creo que aportas mucho, pero no te confundas. Los postulados metaficcionales podrían incluirse en la parte lírica del vídeo. En el momento en que Ibrahím pone en primer plano los razonamientos (nada metaficcionales) de Vicente Luis Mora y Eloy Fernández Porta, entre otros, está haciendo otra cosa. Ese es el gesto interesante de su obra.

El Miope Muñoz dijo...

ibrahím, digo AGUSTÍN. Jajajajjaa. QUE LÍO.

Ibrahim B. dijo...

Sigo hecho un lío, Alvy.
Vas a tener que venir a Madrid a explicarmelo de jeto a jeto.

observer dijo...

Vaya. Aquí hay mucha gente de letras :-) Yo soy arquitecto, y en nuestra disciplina la crítica juega un papel muy diferente, mucho más "materialista" en el sentido Marxista, en cualquier caso el debate sobre la legitimidad de quiensea para hacer crítica, me parece estéril.
De todos modos, leyendo a los action-artists, creo que la obra de arte no es un mensaje sino un acontecimiento, su poder no está en el "mensaje" sino que su poder no es el de "evocar", sino de ocurrir". Me explico mal, y de todos modos la mía es una postura de arquitecto, que no podemos permitirnos hacer crítica como quien habla del sexo de los ángeles.

El Miope Muñoz dijo...

Au contraire, me parece muy interesante lo que comenta usted, señor observer.