lunes, enero 02, 2006

NAPOLEON DYNAMITE: ¡Vote for Pedro!

Napoleon Dynamite.
(Napoleon Dynamite, 2004).
D.: Jarod Hess.
G.: Jarod Hess y Jerusha Hess.
I.: Jon Hedder, Jon Gries, Aaron Ruell, Efren Ramirez, Diedrich Bader, Tina Majorino, Sandy Martin, Haylie Duff, Trevor Snarr, Shondrella Avery.
Duración.: 86 minutos. Color.

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Su nombre es Napoleon Dynamite. Su animal favorito es el Ligre ( una mezcla entre el tigre y el animal). Cuando su vida le pone en evidencia su triste existencia, él.... ¡sale corriendo! Si amigos míos, para inaugurar este año, he escogido la que es una de las mejores películas del 2005... y la verdad me he encontrado con un film de culto.

Napoleon Dynamite se mueve entre los suburbios de Todd Solondz y los de Wes Anderson, con un toque del cine de Harmony Korine, y es la película freak por excelencia, que se convierte en una comedia adolescente protagonizada por un perdedor pero que se sitúa en las antípodas de todo lo rodado, y le da la vuelta al clásico género con su trasfondo triste, y con esas vidas patéticas que retrata.

Gracias a esos toques de humor podemos entender al clásico marginado de gesto torcido, que en nuestro peculiar antihéroe se convierte en un pobre muchacho, que a pesar de sus peculiaridades ( yo diría genialidades) quiere vivir en paz y con una chica a la que ame. Lo que ocurre es que es poco locuaz con sus sentimientos. Y el clima familiar no es el deseado. La trama se inicia cuando su abuela tiene un accidente inesperado, y su tío Rico un hombre anclado en 1982 se hace cargo de él y de su hermano, un tipo de 31 años que se pasa el dia chateando con su novia vía internet. Así que las excentricidades de Napoleon cobran todo el sentido con este fondo que realmente retrata a la perfección el sueño americano, que perfectamente personifica Rex, un peculiar saco de musculos adicto a los esteroides, que dice que ha inventado el Rex-Kwon-Do.

El film es una sucesión de gags, y la narracion discurre tranquila, y está llenísima de hallazgos, de chistes geniales, y de líneas de humor inolvidables. O la escena del baile de Napoleon, que se ha convertido en una antología absoluta debido a su comicidad. O cuando Napoleon prueba la máquina del tiempo que han comprado vía internet.

Jarod Hess se ha convertido en uno de los directores mas interesantes del panorama actual, y realiza un gran trabajo aprovechando siempre los planos fijos. El guión que escribe junto a Jerusha Hess no se queda atrás, mostando un retrato muy crítico con la sociedad opresiva e intolerante que muestra, pero presenta mucho más tacto con su catálogo de fracasados. Jon Hedder en todo un actor de culto, ya que el papel protagonista lo borda, a pesar de no mover mucho su cara durante todo el metraje, consigue estar espléndido. El resto del reparto no se queda atrás, estan geniales personificando a los espectros mas freaks de USA, y por lo tanto, el lado más cotidiano, más humano del american way of life alejado de estereotipos.

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Aunque el final es bueno, no es precisamente un happy ending, y va concordando todo ese espíritu de humor absurdo que cubre la tristeza de unas vidas de unos inadaptados sociales. Aunque el film solo sea un entretenimiento no se le puede negar la innegable originalidad que propone. Una comedia anticlimática y arrítmica para muchos, con un ritmo reposado pero no aburrido, de esas que causan animadversion a partes iguales. Una joyita de culto llena de pequeños detalles que la hacen muy grande (Esas posturas emulando a los caballeros del Zodiaco) y la convierten en la gran película freak americana, o el gran festival de la cinefagia.

Puntuación.: 8,5.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Es buenísima. No puedo expresar la impaciencia que siento ante el nuevo proyecto de su director, "Nacho Libre", en el que Jack Black encarna a un cura mexican que se hace luchador para salvar la iglesia de su pueblo.

El mejor. Argumento. De la historia.

John Trent dijo...

Esta bien aunque se la ha sobrevalorado, al menos en Estados Unidos.

Anónimo dijo...

En el último festival de cine de Sundance, Estados Unidos, concursó "Napoleon Dynamite" un film en verdad completamente independiente, no como suele ocurrir últimamente en este y otros certámenes del mismo pelo, donde cada vez son más las películas que ya han traspasado esta categoría y sin embargo toman parte. Consiguió un espectacular éxito, sobre todo de público.
Se trata de una pero que muy particular cinta, que supone el primer trabajo en la dirección del joven Jared Hess , quien junto a su esposa escribió también el guión. Ambos tienen veinticinco años y, como jóvenes que son, creyeron conveniente narrar una historia sobre adolescentes e institutos, un género que siempre ha tenido éxito en Estados Unidos. Sin embargo este trabajo no se parece casi nada a la mayoría de ellos.
El protagonista, Joh Heder y el director Hess, rodaron un cortometraje con el mismo personaje central, y en vista del éxito decidieron seguir "sus aventuras".
El resultado es un film estrambótico, con personajes estrafalarios que, no obstante, acaban por resultarnos enternecedores. Son ridículos y en verdad singulares. Cualquier espectador de estos lares les verá casi casi como extraterrestres, sin embargo nada más lejos de la verdad, pues en E.E.U.U. este tipo de gente existe, tal como aparecen o al menos de parecidas características. En ellos confiesan haberse inspirados.
La película posee ironía a raudales y un sentido del humor que va de lo chabacano a lo sutil, del esperpento a lo emotivo. Tarda un poco en entrar en materia y se hace necesario un periodo de adaptabilidad al medio, esto es, al espíritu de la cinta, pues a simple vista puede parecer una broma, no se sabe si de buen gusto. Poco a poco todo va tomando forma y la pericia de la entonada realización, que nunca pierde la compostura pese al material de que dispone, y el trabajo de los intérpretes, en todo momento encomiable, hacen de esta película un buen pasatiempo. Aparentemente, sus diálogos resultan simplones, pero poseen una mala baba realmente notable que torpedean sin piedad, aunque sin hacer sangre, estamentos y modos de vida "profundamente" estadounidenses.
La sonrisa en todo momento aparece en la boca del espectador e incluso la carcajada aparece de vez en cuando.
Su final (aparentemente) es muy bueno, sencillamente magnífico, con la elección estudiantil, número musical incluido. Es, sorprendentemente emotivo.
Para finalizar contaré una anécdota especial. Cuando "finalizó" la cinta, comenzaron los títulos de crédito mientras una canción preciosa sonaba. Todo el mundo se levantó y se marchó. Yo me estaba poniendo el jersey y la bufanda y al levantarme, cuando no había acabado la canción, vi que el proyeccionista me hacía señas con la mano para que me sentara. Yo le hice caso sin saber a qué se debía. Pues bien, cuando acabó la canción hubo, todavía, un epílogo lo menos de seis o siete minutos. La historia continuaba, la película no había finalizado.
Desde aquí quiero agradecerle a esta persona su consideración hacia mí, un espectador. Normalmente esto no sucede y es de recibo manifestarlo. ¡Gracias, compañero!.

El Miope Muñoz dijo...

La verdad es que si, es un film que consigue convertirnos en humanos a los personajes mas desplazados.

Jarod Hess tiene un tacto formidable y Jon Hedder es un grandisimo actor.

Un saludo!

Anónimo dijo...

LA verdad es que en España esta pelicula es desconocida, pero tengo que reconocer que tras verla por segund avez me he convertido en un fan, sobre todo de Pedro. que ambientacion mas buena, y que bonitos paisajes los de Idaho, los personajes tienen tanta personalidad, en fin una excelente pelicula que en España nunca se entenderia (y menos si se ve doblada al castellano, suena horrible)