miércoles, diciembre 19, 2007

Chase'n'grind


Philip D'Antoni ha dedicado sus esfuerzos más bellos a unificar velocidad y cine negro, con un resultado envidiable: ha producido las tres mejores persecuciones del policíaco sesen/setentero. Las dos primeras ya las conocemos, centrémonos en la tercera.: Para su primera película como director D'Antoni rescató a varios sospechosos habituales como el expolicía Sony Grosso o el mejor Roy Scheider (de protagonista), también puso en el guión al futuro guionista de, precisamente, French Connection 2 (¡en un tiempo en que las secuelas las podía dirigir John Frankenheimer!), mr. Alexander Jacobs, que ya había escrito nada más y nada menos que Point Blank y Sitting Target, un clásico del todavía maldito Douglas Hickox.

Así la tercera gran persecución de D'Antoni parece ir en letra pequeña pero no: The Seven Ups es una película no sólo esencial para entender muchos de los logros de la también excelente The Shield, sino la clase de policial triste y duro que se ambienta en una Nueva York que ya parece no existir nunca más para el cine. Y su persecución igual: pura intensidad que ha desaparecido en el cine actual (los excepcionales Tarantino y Greengrass aparte).

1 comentario:

Ryu_gon dijo...

En el caso de Death Proof,lástima que la excepcional persecución del final se haya convertido en la baza principal de muchos para minorizar las otras partes de la película. Porque este tipo de secuencias, por lo general, gustan a un sector amplio del público, que así ya tiene la excusa perfecta para "cargarse"los diálogos entre Jungle Julia y compañía y los pequeños-grandes detalles del film.