jueves, julio 05, 2007

The Dark Knight is Back

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Batman está de suerte. La serie regular que edita planeta mezcla Detective Cómics con Batman e incluye un par de historias de cada arco. Grant Morrison en la primera y Paul Dini en la segunda. El All-Star Batman tiene a Frank Miller y Jim Lee al frente. ¿Con este plantel cualquiera se queja, eh? Pues SÍ.

All Star Batman and The Boy Wonder propone situarse unos años antes de lo que será el DK milleriano y lo hace a lo hiperbólico: todo está lleno de mujeres fatales, de relaciones imposibles y.... de remedos Millerianos. A ver si me explico: los mejores momentos de All Star Batman vienen por su desmedida y loca violencia, pero da la impresión de que Miller se ha dejado su capacidad de reinvención en otra parte. Se limita a ofrecer un buen concierto y a tocar covers: la relación entre Superman/Wonder Woman es parecidísima a la de Dwight y Gail, el Batman nos devuelve gran parte de las siluetas de Marv y sus amigos.... Uno no puede dejar de amar All Star Batman pero tampoco puede dejar de reprocharle que no sea más loca y que sea Miller quién decida lo que es alimenticio y lo que no. Su Robocop VS. Terminator era, fundamentalmente, un ejemplar cómic de acción con una serie de hipérboles ultraviolentas construidas de una forma perfecta y en clave netamente derivativa. Las aportaciones de Miller (el enfado de Superman con Batman por el secuestro del joven Grayson) suenan a vaga reedición y hecha para millerianos nostálgicos... o algo. No todo está perdido: queda la sensación, certera, de que por poco que se esfuerze Miller puede hacer algo muy notable, pero para ello requieren ganas de tejer nuevas situaciones y adaptarse a un argumento que le de para saborear su estilo indudablemente visual y violento. Sería una locura criticar al tebeo por lo psicótico que es Batman, de hecho esto es lo que más nos gusta.

Justo lo contrario ofrece Grant Morrison. Tanto al frente de Batman sabe que para afrontar la tarea de estar frente a un ICONO la mejor idea es llevarlo todo al extremo. Recuperando una trama paternofilial de la saguita de R'As Al Ghoul el número empieza con la imagen del Joker diciendo que ha matado a Batman. Dos páginas más tarde la situación SE INVIERTE. Literalmente. Y después tenemos una maravillosa historia de Paul Dini: parece el equivalente de un cuento de John Cheever ,de recién llegados a una ciudad grande (y la melancolía existencial que ello conlleva) sumado a la presencia del murciélago. Por si fuera poco.


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Y nuevamente Morrison se patea a gusto con Miller, en su All Star Superman. Empeñado en hacernos revivir el sense of wonder de la pulpa, las aventuras de Superman son lo que en algunas ocasiones parecía que iba a ser la cinta de Bryan Singer: una verdadera recuperación de la belleza de lo son las aventuras de una deidad en la tierra. Y sin coñazos cristianos ni nostalgias mal entendidas: el tebeo de Morrison y Quitely contiene todos esos bichitos monstruosos que tanto nos hicieron vibrar en New X-Men, o lo que es lo mismo, tramas de pura ciencia ficción insertadas en el mundo del hombre de acero. Sin coartadas ni sellitos de auteur, la imaginación de Quitely desborda y la diversión contagiosa de Morrison también. El resultado es maravillloso: el mejor tebeo de Superman de la década, a competir con Loeb & Sale en un ranking.

1 comentario:

Anónimo dijo...

De acuerdo respecto a ambos comics. Añadiría de All Star Batman que el dibujo de Jim Lee no pega ni con cola con la narrativa sucia de Miller que está muy por debajo de mínimos en esta propuesta.
En cuanto a Morrison y Quitely, no puedo decir más que... los adoro. Pobrecitos Tim Sale y Jeph Loeb