Los Renegados del Diablo.
(The Devil's Rejects, 2005).
G y D.: Rob Zombie.
I.: Sid Haig, Bill Moseley, Sherri Moon, William Forsythe, Leslie Easterbrook, Danny Trejo, Ken Foree, Matthew McGrory, Geoffrey Lewis.
Duración.: 109 minutos. Color.
BSO (click en la canción y sigan las instrucciones):
Lynyrd Skynyrd - Free Bird.
Otis Rush - I can't quit you baby.
Terry Reid - To be treated.
Elvin Bishop - Fool Around and Fell in Love.
The Allman Brothers Band - Midnight Rider.
Terry Reid - Seed of memory.
¿Qué debe ser una secuela? En principio (y esto no es ninguna norma, simplemente una vaga apreciación personal) ya no tiene demasiado sentido que sea una continuación formal de la anterior. De hecho tiene que ser una subversión formal y temática a la primera entrega. Y esto pasa en las mejores secuelas. El imperio contrataaca es gélida, oscura y triste y es el perfeco contrapunto a su alegre primera entrega. El padrino II supone el final de los gángsters honestos y de la familia unida, es la desintegración total de los pilares que sostenían la primera entrega.
Así Los renegados del Diablo gana por mucho a su primera entrega, que ya admiré, y no por ser excesiva, ni por ser hiperbólica (como Terminator II ) sino porque borra completamente del mapa la concepción del Bien y del Mal. Cambia el esquema y cambian los referentes. La película opta por ambientarse en el pleno día y lo que antes eran los clásicos de Hooper y Craven ahora son la segunda entrega de la Matanza de Texas de la que toma prácticamente todo su esquema conceptual y argumental.
Max Renn ya citaba en su crítica a Peckimpah, pero no solo él nos viene a la mente cuando vemos esta cinta, sino también el mejor de sus díscipulos, Walter Hill del que Zombie codifica su mejor ritmo para la violencia en los tiroteos. El acento posmoderno en esta cinta es total (pero ya conocemos a las críticas y Rob Zombie nunca sonó igual que Quentin Tarantino) y no es que sea un pastiche de géneros, es que prácticamente es imposible definirla (en el mejor de los sentidos) y ahí radica su acierto. No es una cinta de terror, pero tampoco una road movie al uso, ni siquiera un western psicótico, es un puro viaje a la América Profunda de los años setenta.
El antagonista perfecto de la familia es el sheriff Wydell (espléndido y enorme William Forsythe) un hombre dispuesto a ser el brazo justiciero de Dios, que parece salido de Quiero la cabeza de Alfredo García, y es tan psicótico como la família Firefly. Y es entonces cuando Zombie se toma el lujo de pintar a Wydell completamente aberrante y psicótico, y ver a los psicopátas rurales convertidos en una família unida y perseguida.
Zombie dirige como nadie, su dirección esta llena de ESTILO (con mayúsculas) y frenética traslaciones visuales setenteras, y una de las mejores bandas sonoras que he escuchado en muchísimo tiempo ( tienen algo de ello arriba) con lo mejor de los setenta: empezando por los sudorosos sonidos del mejor rock sureño (ahí están los Lynyrd y los Allman que abren y cierran el film, respectivamente), los tristes blues de medianoche (la imprescindible presenta de Otis Rush, basta con escucharlo para saber vendió su alma al Diablo), y el más desatado sound del country demoníaco (las elegíacas baladas de Terry Reid) que apoyan perfectamente las peripecias de la prole de Spaulding. Y claro, si a esto sumamos que excepto Karen Black, repite el mismo reparto de la primera entrega (y la pasión fetichista de Zombie por filmar de arriba a abajo el cuerpo de su esposa y contagiarlo al espectador) pero sumemos a Danny Trejo, Matthew McGrory y .... Ken Foree. Además el nombre de origen marxista (de Groucho, no de Karl) se resuelve con una bromita de Zombie a costa de los críticos de cine con la aparición de uno que no se priva de hacer mención a la filmografía más oculta del autor de Memorias de un amante sarnoso.
La cosa no termina aquí porqué no sólo es una fiesta para cualquier aficionado al género de terror sino que es una de las mejores cintas de la década dónde cada uno de sus excesos es harmónico y nos regala las mejores y más perversas secuencias que tenemos, y se permite el lujo de convertir en héroes a su família que se despide al ritmo de Free Bird de Lynyrd Skynyrd.
9 comentarios:
Gracias por la mención, Alvy.
¿Te has comprado ya el pack de Rob Zombie?... Tengo curiosidad por saber en qué varía la versión que se estrenó de la que aparece como "montaje del director" en el pack...
Que GRAN pelicula.
Y magnifica B.S.O. ;)
Que injustamente olvidado esta el gran walter hill
Que grande. Impresionante.
Y Ken Foree, y Michael Berryman, y... joder, todos!!!!
FREEEEBIIIIIRD!!!!!
Buena continuacion de la infravalorada La casa de los 1000 cadaveres. Desde luego, una pelicula notable, que da un giro a lo que vimos en la anterior, lo convierte todo en un western violento y malsano, con unos improvisados anti heroes como protagonistas y una direccion sorprendente de Rob Zombie.
Vi en el cine La casa de los mil cadáveres y no me salí del cine porque nunca lo hago, pero vaya mierda...
Y eso que hacer el mongolo con esos clásicos metálicos como More Human Than Human, Dragula o Superbeast me gusta bastante.
Vaya, vaya... pongo en Google 'BSO Los renegados del diablo', para averiguar el título del impresionante tema final de la película de Zombie... y me encuentro, en primer lugar, el blog de mi estimado Alvy Singer. Me alegro. Total, que me metí y leí lo escrito, muy merecida la opinión.
Porque esta secuela rockera, sudorosa y sangrienta de la ya de por sí interesante 'La casa de los 1.000 cadáveres' es un peliculón con todas las letras.
Zombie mola, tanto como músico como director y guionista.
Soy SRS.
terrible pelicula la vi en telefe argentina jej, y la verdad me parecio buenisima, jaja, no sabia como se llamaba pero me acordaba de el tema del final freebird, q buen final ese tema te pone la piel de gallina jaj. bueno gracias por ayudarme a encontrar esta peli. saludos
Lo unico que quiero saber es ¿que tiene que ver grouncho marx con los rechazados del diablo, o con el capitan spaulding?
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