viernes, noviembre 23, 2007

Una historia personal del poscine (1)

Hay una sentencia tonesina maravillosa sobre Mark Millar que dice que la gente confunde continente con contenido. Algo así pasa con la nueva moda del poscine, esta cosa que ha llegado aquí nuevecita y reluciente para demostrarnos que ya se ha ido más allá del cine. Lo acuña mucho Jordi Costa y lo usa así en plan decorativo en dos de sus críticas más impactantes: la de Inland Empire y la de Sin City.

No tendría mucho mérito, a estas alturas, decir que Jordi Costa está equivocado. Voy a trazarles mi particular abierta historia del poscine, que por cierto anda enterrado hace mucho tiempo, y la dejaré abierta. Si señores: Una historia personal del poscine no es otra cosa que eso. Justo Eso. Otro work in progress que inicia este blog porque sí.

-The Big Shave (1967, Martin Scorsese)
-Cabeza Borradora (1977, David Lynch)
-Detective (1985, muerte del poscine por Jean Luc-Godard)
Estas películas las tengo clarísimas. Ahora bien, voy a lanzar unas cuantas sobre las que dudo personalmente mucho:
- Un chien andalou (1929)
-Tout va bien (1972)

Algunos ejemplos equivocados de poscine:
-A cock and a bull story (la metaficción es un recurso muy antiguo ya para llamarlo poscine ¿Ustedes dirían que Niebla de Unamuno es posmodernidad? Pues eso).
Algunas (pos-pre-infra)reflexiones inoportunas:
-El poscine es una cosa muy afrancesada como Las vida: instrucciones de uso o la Rayuela.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Interesante retrotraerse al siglo XX
buscando antecedentes, pero el término poscine no solo implica un desprendimiento de las convenciones narrativas y la lógica aristotélica, también comporta un contexto espectatorial y tecnológico concreto:
el cine museístico, las redes p2p...
Creo que un análisis historiográfico debería considerar esos ámbitos.

El Miope Muñoz dijo...

Coincido en lo de cine museístico pero ¿redes p2p? Es muy interesante y me gustaría que lo desarrollaras. Yo personalmetne creo que el p2p cambia la visión del espectador y del acceso a la cultura, no neceseramiente la del realizador. Pienso yo eh? Pero sus apuntes deben ser desarrollados, pienso sobre ello.

Sin City me parece un ejemplo equivocado de poscine porque los elementos que la hacen así son casuales, no determinantes. Es paleta porque Rodríguez es un experimental garrulo, pese a quien pese, su estructura está desordenada porque Rodríguez quiso pulpfictionarse (o vaya usted a saber). ¿Usted diría que sin city es producto del p2p o del museo o más bien de una técnica, o que es una cosa similar como la de rodar los simpsons en carne humana?

absence dijo...

Yo propongo The Astro Zombies como poscine. Y lo digo en serio.

Mae Vinler dijo...

Totalmente de acuerdo con lo que dice del poscine. Yo añadiría algunas más, en la misma línea que Absence.

Pero Niebla de Unamuno es absolutamente postmoderna.