miércoles, octubre 21, 2009

Curso del 63: El Franquismo es la Respuesta, no el problema


De acuerdo: ver más de una vez Curso del 63 es un poco aburrido, porque todas sus virtudes son obvias al primer visionado y el resto es reiteración. Pero su éxito es sintomático del momento en el que vivimos: una crisis de la educación (con agradecimiento que se diría casi disculpa ) y el problema de la autoridad que quiere resolver Aguirre. El momento es perfecto, con una crisis económica y una polémica reforma educativa: curso del 63 formula un esquema perfecto. Seguramente la neoizquierda pensará complacida que, ay, el salvajismo no es la solución y algunos pensarán que la fantasía de poder, protofascista, es la solución.

Con un exquisito simulacro y con la presunta transparencia de la buena (mala) televisión, Clase del 63 es un corolario perfecto tal y como lo fue Cuéntame en el esplendor del Partido Popular.: la ilusión de que el franquismo es la respuesta, nunca el problema, y la elusión de que los padres de los presuntos teenagers ni se educaron en 1963, ni aparecen nunca acusados cuando, evidentemente, son los responsables principales y últimos de su educación. Es decir: gran televisión que amplifica los miedos y conforta la conciencia.

2 comentarios:

Vomiton dijo...

Los padres no son responsables de nada, los padres, como los delincuentes, deben considerarse inocentes mientras no se demuestre lo contrario.
La sociedad corrompe a las mentes debiles de los muchachos con la facilidad con la que el AVE corta una tarrina de Tulipan.
Para saber si unos padres son buenos educadores debería investigarse en un entorno cerrado y aséptico como un laboratorio. Cosa imposible.
El Franquismo, como cualquier sistema autoritario, genera secuelas irreparables, pero considerar un entorno franquista acotado en espacio, tiempo y potestades para nuestra sociedad no sería sino experimento interesante.

Mycroft dijo...

Antes uno descubría que los reyes magos son los padres. Ahora uno está asistiendo perplejo al fenómeno inverso: No hay padres, son los reyes magos.
Me interesa esa referencia a esa serie manipuladora de la nostalgia y de tufillo de lo (historicamente) correcto, que es cuéntame (Aquellos maravillosos años en versión a lo Mercero). De aquellos polvos estos lodos.