Con motivo de Sant Jordi y el Día del Libro, desde este blog continuamos con un especial que también incluye especiales ¡con special guest stars y todo!
Por el Señor Toldo - Doctor Honoris Causa por la Universidad de Babel y Detective Adjunto a la Unidad de Posliteratura
Caso 3 – Hipersensibles a la autoconsciencia narrativa y espiritual en busca del aura literario en la densidad sintáctica descontrolada (con poco tiempo para la lectura)
– Síntomas:
Nadie entiende mis notas cuando dejo algún recado. Tengo varios cuadernillos Moleskine –abultados el doble de su tamaño original– ordenados por estados de ánimo. Sólo puedo leer en el transporte público y Joyce me dobla la espalda. No quiero que la gente piense mal de mí cuando sigo en la misma página varios minutos mirando las piernas de la chica sentada en frente. El nuevo diseño del plano de Metro de Madrid me parece una delicia semiótica para los sentidos.
Recomendaciones:
- Las babas del diablo – Julio Cortázar
”Si se pudiera decir: yo vieron subir la luna, o: nos me duele el fondo de los ojos, y sobre todo así: tú la mujer rubia eran las nubes que siguen corriendo delante de mis tus sus nuestros vuestros sus rostros. Qué diablos.”
Preparado: No sirve para ligar como Rayuela, pero puede o no conocer a enigmáticas mujeres envueltas en crímenes que puede creer haber o no visto. Fuente de un soberbio trío de ilustres cántaros: Antonioni, Coppola, De Palma.
Posología: 10 pags. disponibles en Las armas secretas, que incluye excipientes como El perseguidor, elegía jazzística a la gloria de Charlie Parker.
- Aquí y allí – David Foster Wallace
“Dijo que las unidades poéticas que aluden, evocan, traen recuerdos y son limitadas de modo variable por la experiencia particular y la sensibilidad de cada poeta en concreto y de cada lector, dejarán paso a símbolos que serán y a la vez remitirán a lo que designan, y que tanto el límite como la infinitud de lo que es real puede ser expresado mucho mejor mediante el axioma, el signo y la función. A mí me encanta Emily Dickinson. Le dije que no podía fingir que lo entendía y que no estaba de acuerdo, pero que me parecía que sus ideas sobre la poesía iban a conseguir que esta pareciera fría y triste.”
Preparado: Diálogo interior en estéreo de ámbito doméstico. Guía para conjugar el pretérito imperfecto de los verbos franceses acabados en –ir y cómo reparar una cocina eléctrica mientras toda tu vida se desmorona por la imprevisibilidad de la narración materializada. Atenúa el riesgo de sobredosis ante consumo accidental de Hacia el oeste, el avance del imperio continúa.
Posología: 28 pags. disponibles en La niña del pelo raro, que incluye excipientes como Animalitos inexpresivos, que es lo que realmente debería estar leyendo, so hippie.
- Menelaid – John Barth
““ ‘ “ ‘ “ ‘ “Love!” ‘ “ ‘ “ ‘ “”
Preparado: Ha sido considerada una “orgía de puntuaciones”, pero también es como ver una serie de muñecas rusas desde dentro de la más pequeña y desde fuera de la mayor a la vez. O un cuestionamiento moral de la omnipresencia del narrador. Recordamos que es importante que sea administrado vía “voz impresa”. Peligroso si el tratamiento se mezcla con consumo de alcohol. Sí son recomendados derivados de Cannabis sativa.
Posología: 38 pags. disponibles en Lost in the Funhouse, que incluye un montón más de excipientes en forma de golosinas metalingüísticas, entre ellas una cinta de Möbius recortable.
En caso de urgencia...
- La casa de Asterión – Jorge Luis Borges
“¿Cómo será mi redentor?, me pregunto. ¿Será un toro o un hombre? ¿Será tal vez un toro con cara de hombre? ¿O será como yo?”
Preparado: La Historia la escriben los vencedores. La visión del narrador también acaba, no solamente en los límites de su subjetividad, sino en su muerte. Las puertas y los pasillos [son infinitos]. Riesgo de sobrecogimiento tras lectura de su última línea.
Posología: 3 pags. disponibles en El Aleph, que incluye tres dosis más con el mismo concentrado (El inmortal, El Zahir, El Aleph) y luego como excipientes alguna que otra decena de potenciales obras maestras.
2 comentarios:
Me declaro enemigo a ultranza de Cortazar. Es mi némesis literaria (o una de ellas), y lo toruraría del modo más cruel posible si siguiera vivo: Obligándole a leer sus propias obras.
Borges no me convence, pero lo veo más freak, más entrañable, menos serio, y más fan de Lovecraft. Así que hurra por él y sus cuentecillos ingeniosos pero sedantes.
Alvy, qué entradas éstas de los libros para gente miserable. Trocito de texto y conclusiones, las reseñas deberían hacerse así: son más sugerentes. Un abrazo.
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