miércoles, agosto 06, 2008

Everybody was Kung Fu Panda

-Spoileracos Included -

Podría interpretarse Return to 36th Chamber (1980, Lau Kar Leung) de varias formas: la primera como deconstrucción de los códigos narrativos de su primera parte, como auténtica parodia y la segunda como respuesta de gran espectáculo a la Golden Harvest que hacía tambalear toda la épica construida por la Shaw Brothers.

Kung Fu Panda no es una obra maestra. Es una película DreamWorks de concepto, con su historia de la superación personal, de los feos también mojan tan políticamente correcta pero esta vez sin otras pretensiones que la de hacer una película de hostias, de artes marciales. Sí, todo el rato. Por eso es también la primera película digna de DreamWorks por encima de bromas pseudoinfantiloides como Shrek y derivados. Es una historia canónica de Kung Fu, ambientada en China. exhibiendo su orgullosa condición de fábula en todo momento (y sin ningún gag referenciando otras películas para bobos) y orgullosa de su condición derivativa, poco dispuesta a saltarse a la torera las reglas sino es para matizarlas con cierto humor. En cierta manera, Kung Fu Panda no es otra cosa que Return to the 36th Chamber contada a los niños. Ambas adoptan como gag y resorte narrativo el hecho de que sus protagonistas tengan una habilidad esquinada para desarrollar sus kung fu y hacen de ello un clímax final. Y eso está muy bien.

Con un prólogo de animación y frenesí reminiscentes del anime, la película se gana a los más jóvenes enseguida. Con el mejor diseño de personajes que ha lucido nunca DreamWorks la película pronto alza el vuelo: Oogwaty y Shifu son posiblemente los personajes más expresivos y bellos que ha dado una cinta de estas características.

Lo que más me gusta de Kung Fu Panda no son sus estupendas escenas de acción y lo bien planificadas que están, una virtud que ya se insinuaba en Shrek 2 con su clímax final sacado de los Cazafantasmas, destacando esta vez la impresionante fuga de Tai Lung (y la presentación de la cárcel) sino como es capaz de no ceder ni un milímetro de sus pretensiones genéricas y llevar a buen puerto sus intenciones hasta el final. Hay un momento especialmente delicado, cuando Tai Lung descubre que en el manuscrito no hay nada. En ese momento un personaje con una carga trágica notable (que sirve sólo para darle connnotaciones míticas, como en todo film de Kung Fu) podría haberse redimido. Pero no, la lucha sigue. Esa es la dinámica auténtica del blockbuster veraniego, la de osorprender, en dosis meridianas y dar un espectáculo lleno de escenas memorables. Y en ese aspecto, Kung Fu Panda es el blockbuster más honesto y capaz de este verano.

3 comentarios:

Hernán dijo...

Estoy de acuerdo, me gustó mucho la película. Y en comparación, hasta diría que me gustó más que la correctísima Wall-e, inflada por la crítica de todo el mundo y catalogada como "obra maestra"...

Saludos!

Hernán.

Libertino dijo...

Jó, es que el robotito cautiva aunque vayas preparado tras tanta ultralabanza. He estado a puntito de ver al panda estar tarde en programa doble tras wall-e, pero me espero a mañana pa verla tranquilamente mientras todos van a ver la de Disney.
Son varios sabi@s ya los que me hablan bien del panda.

Ryu_gon dijo...

Se me antoja difícil no salir del cine con una profunda satisfacción al admirar una joyita como esta.

Si Chris Farley levantara cabeza seguro que le saltarían los colores al ver que sus gags han sido vapuleados por un Panda animado.

Por una vez, gran trabajo de Dreamworks.

Saludos!